The Crying Ligh. Antony and the Johnsons
Tenía ganas de saborear cada una de las diez canciones de este esperado disco. Cuando vi la portada ya me sorprendió por la fotografía de Naoya Ikegami en la que aparece el bailarín Kazuo Ohno a quien Antony & the Johnsons le han dedicado este disco. Según dice Antony: “Vi una de sus actuaciones en las que proyectaba un círculo de luz en el escenario. Dentro de ese círculo revelaba los sueños y meditaciones de su corazón. Parecía bailar ante algo misterioso y creativo. Con cada gesto personificaba la divinidad del niño y de la mujer. Es algo así como mi padre artístico.”
Los diez temas de este nuevo disco tienen la misma sensibilidad y elegancia que los anteriores trabajos, pero a diferencia de sus otros álbumes no todo es tristeza, hay también algunos momentos alegres donde la luz lo envuelve todo como en Kiss my name. Los sentimientos siguen aflorando en cada una de las canciones y estremecen las notas del piano y la voz conmovedora de Antony.
En la entrevista que aparece hoy en Babelia el cantante confirma el caracter íntimo de The Crying Ligh. "Mi primer disco Antony and the Johnsons, 1998 era como ver un concierto en un escenario. El segundo, I am a bird now, era como escucharme en mi habitación. Y éste quería que tuviera las dos cosas a la vez: un núcleo íntimo y el sentido de naturaleza".
1 comentarios :
Voy a escucharlo, gracias por la propuesta.
Un buen blog. ^^
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